Cualquiera que me conozca un poco sabe que no renuncio a mis 7 horitas de sueño entre semana porque sí…
Y también que hay un par de cosas a las que no me puedo resistir: una entrada de teatro ocupa el segundo puesto, de modo que esta noche llegué a casa pasada la hora bruja y con una tremenda cara de satisfacción .
Malas Palabras es una obra de la compañía Teatro Pertinaz. Saliendo de la sala he observado en el folleto que la representación ganó algún que otro premio en el año 2001… Sinceramente creo que no es de extrañar.
Me ha sorprendido, eso sí, que en una historia con seis personajes (sin contar la voz interior de la niña y el aparato de radio) interpretada por un grupo de nueve integrantes, ocho se ocupen de la ambientación y una sola interprete el guión desde la primera a la última línea.
Flor, la protagonista… -No cito nombres de actores porque hay muchos más hilos detrás de cada personaje de una obra- Como iba diciendo: Flor, la protagonista, es una escritora que, precisamente esta noche, ha decidido subir al ático de su casa para montarse un estudio en el que trabajar a sus anchas.
No sé si debo contar mucho porque si algún día tenéis ocasión de ir a verla, quizás por saber demasiado lo disfrutéis menos…
Os contaré que en cosa de hora y media he visto a una niña, a su mejor amigo (ese primer amigo que no se olvida), a un vecino asustadizo con muy mala suerte, a sus padres y a su tía (o puede que no…) e incluso alguna que otra molesta vocecilla interior, y que todos y cada uno de estos personajes vivían dentro de uno sólo.
La compañía es mejicana, pero apenas se percibe en el hecho de que la música nostálgica no forma parte de nuestra infancia sino de la suya… Aún así, es facilísimo adoptarla!!
Otorrinolaringólogo… ¿Es el médico que cura a los Otorrinos? 😉